Uno de los lugares más hermosos de todo el planeta tierra está escondido en un refugio perfecto; paz, belleza y ensueño es lo que su interior ofrece. En la provincia de mayor tamaño de Filipinas de la región de Bisayar Occidentales, Palawan, se encuentra El Nido, el lugar ideal donde la naturaleza habla por sí sola y muestra toda su belleza.
En el archipiélago de El Nido se puede sentir que por primera vez se contempla paisajes de formatos imposibles, de silencio y soledades envidiables, de una calidez incomparable, todo lo que propicia sentirse sobre las nubes. Esta isla alargada como si fuera una barra de pan posee un importante número de salanganas, aves similares a las golondrinas; éstas son las que dan el nombre de El Nido en esta parte de Palawan ya que los imponentes peñascos de mármol negro tienen suficientes grietas como para que puedan construir sus respectivos nidos con saliva solidificada.
Debido a la importancia de los recursos que posee El Nido ahora es una zona protegida, de esa manera, combate las injusticias causadas por la mano del hombre; seres a los cuales acechaban los nidos para conseguir más salanganas para venderlas mejor postor, ganaba dinero pero El Nido sufría un duro golpe en su ecosistema.
Para conocer El Nido en toda su extensión y majestuosidad lo ideal es hacerlo en banca, una típica embarcación filipina construida en base a bambú. Cada una de las islas componentes de Palawan, al igual que su capital Puerto Princesa, poseen cierto microcosmos tropical dando la impresión de que en cada zona existe algo oculto, la mejor forma de averiguarlo es en banca.
Es posible pasear por Pangulasian en donde un mirador en lo alto es la atracción; prosigue el camino por el interior de una Cueva de Pinasil la cual ha adoptado el nombre de catedral; el camino llega al escondite de los japoneses durante la segunda guerra mundial en los cuales escondían sus apreciados tesoros, Cudugnon. En Snake Island los visitantes pueden dar un baño en una de las playas con fondos exóticos donde viven los mamíferos más raros del mundo, la vaca marina. O también visitar las cabañas El Nido de los más exclusivos resorts.
El Nido es un lugar sin igual, parajes para gran cantidad de personas desconocidos pero también una de las zonas de mayor atracción, perfecto para la continuidad de la vida y belleza.
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